“Correr una ultra distancia, sin morir en el intento. Literal, porque el abandono de esta implica una muerte espiritual, para mí por lo menos. El desafío es personal, la meta es la gloria, el camino el purgatorio, y la derrota sería fatal.”

Cuando me planteo correr una ultra distancia, no es a tontas y a locas. Sé que esto implica una preparación, no solo física, sino más bien mental. Hay varias maneras de prepararlas y dependerá del objetivo que tenga en mente. Hay quienes se conforman con llegar a la meta, en tiempos límites, pero sin una buena planificación es riesgoso apostar a la suerte, más aún cuando hay factores externos que no podemos manejar. Si conocemos nuestras capacidades, independiente del objetivo que tengamos en mente, podemos hacer carreras de manera responsable. Para ellos es fundamental una planificación de la carrera.

Más allá del entrenamiento previo, y llegar en buena forma, debemos poner atención a todo lo que implica el entrenamiento (nutrición, descanso, equipamiento, por nombrar algunos),  puede ser de muchas formas. Creer que no entrenamos porque no hacemos trabajo de pista, o repeticiones es errado, podemos hacerlo de igual forma, corriendo libremente por senderos una cantidad de horas o kilómetros semanales. Lo importante es sentir que el cuerpo responde.  Pero de entrenamiento hay mucho por hablar. Lo que realmente quiero compartir es una estrategia de carrera, que puede quizá servirles, que en mi caso ha dado  resultados.

Lo primero es analizar la altimetría y kilometraje, comparándolo con entrenamientos y carreras personales, con el fin de estimar un tiempo total de carrera. Luego dividir la carrera en pequeñas etapas, puede ser  cada ciertos kilómetros, o más fácil es dividir todo entre puestos de control (PC), estimando los tiempos entre cada uno de ellos, parte del secreto es es plantearte pequeños objetivos.  Al finalizar cada mini carrera, tomarse el tiempo necesario para cargar hidratación, elongar y despejar la mente para así ir por el próximo objetivo. También podemos dividir la carrera en dos, dosificando los primeros kilómetros,  si todo marcha viento en popa, la carrera comenzaría en el segundo segmento. Es muy relevante llevar un orden en la  alimentación e hidratación,  hacerlo por tiempos y no necesidad evidente, no sentir sed ni fatiga. En lo personal, aunque los  abastecimientos tengan alimentación, prefiero prescindir de ellos, y consumir lo que estoy acostumbrada, para no tener problemas estomacales. De esta forma, mantengo control de los ritmos, hidratación, y nutrición. Para mantener la mente fría y concentrarme en mi carrera, no me preocupo de quién va delante ni atrás, me limito a seguir el plan de carrera. Si voy con los tiempos estimados de sobra, no aflojo el ritmo. Puede que en algún punto, la estimación falle y necesite esos minutos, o simplemente un imprevisto estomacal o una caída. Lo más importante es no entrar en pánico por la posición que llevemos en carrera, en las ultra distancias todo puede suceder, y si queremos terminar o simplemente continuar sólidos, debemos mantener la calma y concentración en los pequeños objetivos planteados, para alcanzar el majestuoso momento de cruzar la meta y cantar victoria.